Jose Martí lo llamó “patriota eterno,” José Antonio Saco, “el primero de los cubanos,” y José de la Luz y Caballero, “el que nos enseñó primero en pensar.” De esta manera, resulta imprescindible conocer a el “padre creador” para entender la formación del pensamiento científico, social, y político cubano.
(Obras XI).
Félix Francisco José María de la Concepción Varela y Morales nació, el 20 de noviembre de 1788. A los dos años se trasladó con su familia a la Florida, cuando su abuelo materno fue nombrado General de San Agustín. Su primer maestro fue el sacerdote irlandés, Miguel O’ Reilly, ya que existía en la Florida española una fuerte presencia irlandesa igualmente católica.
En 1802 se matriculó en el Real y Conciliar Colegio Seminario de San Carlos y San Ambrosio donde presidió un obispado “antiesclavista, antirracista, partidario de las nuevas ciencias…” (Obras XXV) Una década después, asumió la Cátedra de Filosofía del Seminario de San Carlos. En Tradición y Modernidad, Juan Bosco Amores Carredano considera que su cátedra, que duró diez años (1811-1821) y atrajo tanto a los hijos de la burguesía cubana, “fue sin duda decisiva en en la aparición de la primera generación de jóvenes liberales cubanos.” (188) Entre sus más notables discípulos están José de la Luz y Caballero y José Antonio Saco, con quienes colaboró en dispersas maneras para lograr la abolición de la esclavitud en Cuba y su independencia. Con estos fines, fundó El Mensajero Semanal y El Habanero desde su exilio en Nueva York.
Este exilio se debió a que, junto con otros dos Diputados a Corte representando a Cuba, Varela firmó la invalidación del rey de España. Los tres fueron condenados a muerte y Varela escapó a Nueva York sin poder jamás regresar a Cuba. Allí abrió dos escuelas para niños, un orfanato y una iglesia. Fundó también The Catholic Expositor, y jugó un importante papel como representante de la fé católica en los Estados Unidos, donde la religión protestante dominaba en la mayor parte del país.
Entre Lecciones de Filosofía (1818) y Miscelánea Filosofía (1819) se puede conocer su pensamiento filosófico—en el que trata ideología, sociedad, y física, con una mirada particularmente cubana. Se podría decir que el pensamiento vareliano rechaza la existencia de una ciencia absolutamente objetiva. Para Varela, cada sociedad desarrolla un pensamiento específico. Cada región que asimila ideas externas las va a modificar de acuerdo a su propia realidad.
Desde esta base, crea una ciencia-conciencia cubana. Es por ello popularmente conocido como el que nos enseñó a pensar [a los cubanos]. También es conocido como el padre patriota por su postura anti-anexionista, ya que en varias ocasiones se vio amenazado de vida o muerte por no apoyar la anexión de Cuba a los Estados Unidos.
El 25 de febrero de 1853 muere en la ciudad de La Habana, donde lo llevaron algunos de sus leales discípulos, miembros de los Jóvenes Ilustrados, con esperanza de que se recuperara del asma que lo afligió toda la vida. Sus restos fueron sepultados en San Agustín de la Florida y años después transferidos a La Habana.
